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¿Cuál es el mejor aceite para nuestra salud?
El aceite es una de las principales bases de la cocina mediterránea. Prueba de ello es que cada vez vemos una mayor variedad en el supermercado. Que si de oliva, girasol, coco… ¿Pero son todos igual de buenos para nuestra salud? Pues no, por eso escribo este post para enseñaros cuál es el mejor aceite para nuestro cuerpo.
Los aceites vegetales (de semillas, frutos secos y legumbres) podrían parecer la opción perfecta. Al fin y al cabo no tienen grasas saturadas como la mantequilla y son más baratos que el de oliva. ¡ERROR! La palabra vegetal no siempre significa más sano y en este texto os voy a explicar por qué.
Beneficios del aceite de oliva: el mejor aceite
Bueno, respondiendo a la pregunta con la que titulo este post: el mejor aceite para nuestra salud es el de oliva. ¿Por qué? Pues porque el aceite de oliva es la P****. Perdón que me he venido arriba. Quería decir que el aceite de oliva es puro amor.
- Se trata de una grasa monoinsaturada cargada de ácido oleico, Omega 6 y 3 (ácidos grasos saludables), y de antioxidantes.
- Diversos estudios han confirmado que su consumo actúa de manera positiva en la prevención de diversas enfermedades cardiovasculares. Gracias a su alto contenido en ácido oleico nos ayuda a reducir los niveles de colesterol ‘malo’ (LDL) y aumentar los de colesterol ‘bueno’ (HDL).
- Además, mejoran la circulación sanguínea al aumentar la vasodilatación, lo que disminuye la presión arterial.
- Está recomendado en pacientes con diabetes tipo 2 para reducir la ingesta de grasas saturadas, debido a los beneficios que ya he comentado anteriormente.
- Asimismo, tiene un punto de cocción más alto, por lo que no se quema al cocinarlo y lo podemos reutilizar, siendo el único aceite con esta característica. Aunque después de unos 5 usos deberíamos ya desecharlo.
¿Veis como el de oliva es el mejor aceite?
¿Qué es el AOVE?
El AOVE son las siglas de Aceite de Oliva Virgen Extra ¡BOOM! Seguro que alguno que lo habrá visto en una receta sin saber que era le acaba de estallar la cabeza (o igual eso solo me pasó a mí cuando me enteré).
Se le considera mejor que el aceite de oliva refinado debido a que es más puro. Por tanto, conserva mejor sus propiedades que nos producen los beneficios mencionados anteriormente al haber recibido un tratamiento menor.
Aunque bien es cierto que las propiedades destacan más en crudo. Al calentarlo, esos beneficios disminuyen, por lo que no habría tanta diferencia a la hora de cocinar con aceite de oliva virgen extra o solamente virgen. Y así miramos un poco por el bolsillo.
Los peligros de utilizar aceites vegetales
¡CÁNCER! Perdón, igual he empezado un poco brusco este apartado.
Según un estudio de la Universidad del País Vasco realizado en 2012, los aceites vegetales contienen aldehídos. Se trata de unos compuestos orgánicos que están relacionados con una mayor probabilidad de sufrir trastornos neuronales y algunos tipos de cáncer. ¡Ey! Pero que el de oliva también los tiene, solo que en una cantidad mucho menor.
Su uso está contraindicado porque al ser grasas poliinsaturadas están descompensadas sus cantidades de omega 6 y omega 3. Lo que a la larga termina generando estrés oxidativo e inflamación crónica en nuestro organismo.
No obstante, el mayor problema con este tipo de aceites lo encontramos cuando los utilizamos a altas temperaturas. Los aceites de girasol, colza, arroz, maíz, soja, cacahuetes y frutos secos, al ser grasas poliinsaturadas se convierten en tóxicos cuando los calentamos por encima de los 200 grados. De ahí que no se recomiende su uso para frituras ¡Ah! Y no se pueden reutilizar.
El caso del aceite de palma
Es uno de los más, bueno, es el aceite más polémico. En vez de proceder de una semilla, legumbre o fruto seco, tiene su origen en una fruta: la palma africana o aceitera. Pero que provenga de una fruta no lo hace malo (más info en el siguiente apartado del post).
Se lo ha utilizado, además de en la industria alimentaria, en la cosmética (elaboración de pastas dentífricas y jabones) y en la energética (producción de biodiesel).
¿Por qué se utiliza en la industria alimentaria?
Dos son los motivos principales: el primero, por supuesto, el económico. En el otro lado se encuentra su versatilidad al permanecer sólido a temperatura ambiente y tener una textura untosa que hace que se derrita en la boca. Podría ser sustituido por otras grasas como el aceite de oliva o coco, pero claro, son más caros.
¿Cuál es el problema con el aceite de palma?
Dejando de lado los aspectos medioambientales (que también tienen lo suyo) y centrándonos en lo nutricional, la grasa del aceite de palma es saturada. Pero eso no la convierte en mala de por sí (tengo que escribir un artículo de tipos de grasas como el de tipos de calorías). No obstante, dentro de estas grasas saturadas, las hay mejores y peores, siendo el aceite de palma de las segundas.
Esto se debe a su alto contenido en ácido palmítico, un ácido graso íntimamente relacionado con varias enfermedades metabólicas entre las que por supuesto se encuentra la diabetes. A ello hay que sumarle la presencia de compuestos potencialmente cancerígenos, al igual que ocurre en el caso de los aceites vegetales.
Además, en su refinado aparecen dos sustancias como el glicidol y el monocloro propaniedol. La Autoridad europea de seguridad alimentaria los ha calificado como tóxicos y ha añadiendo que pueden facilitar la aparición de diferentes tipos de cáncer.
Aunque realmente, esas dos sustancias no están solo en el aceite de palma, sino en la mayoría de aceites refinados.
Otros aceites saludables
Pero bueno, ya que estamos hablando de aceites que provienen de frutas vamos a continuar con algunos que igual no son «el mejor aceite», pero sí las podemos considerar como opciones saludables. Se tratan de los aceites de coco y aguacate
Aceite de Coco
Es uno de los superalimentos de moda. Aunque se trata de una grasa saturada, ésta es de cadena media lo que hace que el cuerpo los asimile mejor. Ayuda a aumentar el metabolismo y tiene una menor adherencia a nuestro cuerpo debido a contener esos ácidos grasos de cadena media.
Aceite de Aguacate
Se trata de un aceite muy similar al de oliva. También es una grasa monoinsaturada y sus beneficios son parecidos a los que hemos mencionado anteriormente en el oro líquido. Además, tampoco tiene ningún problema por llevarlo a temperaturas elevadas, siendo perfecto para frituras y aportando el sabor especial de esta fruta.
¡Y nada más! Espero que os haya resultado interesante y útil este post sobre cuál es el mejor aceite para nuestra salud. Cualquier duda, ya sabéis ponédmela en los comentarios o id a mis redes. Os espero en próximas publicaciones.
¡Hasta pronto majos!
