
Entrenamiento
Entrenamiento
Justo el día que escribo esto está lloviendo, pero bueno, es verano y lo normal es que haga un sol de justicia. Hay quien piensa que si entrena cuando más calienta conseguirá mejores resultados, ¿pero realmente entrenar con calor sirve para algo?
Pues a ver, lo primero que quiero dejar claro sobre hacer ejercicio cuando el termómetro aprieta es que es peligroso. Sobre todo, si no estamos acostumbrados, ya que estaremos más expuesto a sufrir lesiones y/o enfermedades como los golpes de calor.
Lo más peligroso que nos puede pasar por el calor haciendo una actividad al aire libre sería un golpe de calor. Antes de que esto ocurra, cuando nos empecemos a encontrar mal hay una serie de pautas que podemos llevar a cabo.
Lo primero que tendremos que hacer será parar de inmediato e intentar descansar tumbados en un lugar fresco y ventilado. Una vez hayamos hecho esto, sería conveniente poner las piernas en alto y elevar la cabeza ligeramente.
Por último también intentaremos refrescar el cuerpo con agua (pero sin tampoco darnos un baño en agua fría para evitar el contraste) y, por supuesto, hidratarnos.
Pero como más vale prevenir que curar. Voy a daros unos consejos ahora para que no tengáis que aplicar los anteriores. La mayoría de ellos son muy lógicos, pero oye, nunca está de más recordarlos.
El primero de ellos es intentar hacer deporte o al punto de la mañana, cuando aún no ha empezado a hacer calor, o cuando empieza a anochecer, cuando ya ha dejado de hacer calor.
Otra cosa que deberíamos hacer es realizar esfuerzos de forma progresiva. De esta manera podremos aclimatarnos mejor a la temperatura y rendiremos de forma más eficiente.
Es muy importante que nos hidratemos más, aunque no tengamos sed. Esta es una de las claves para evitar las lesiones derivadas por el calor. Y además de beber, si hace mucho calor, deberemos refrescarnos en las fuentes que encontremos.
Otra opción sería entrenar en el agua. Así seguro que huiremos del calor.
Tras una buena aclimatación, lograremos perder calor más fácilmente y rendir de manera más eficiente en estas condiciones. Es decir, sudaremos más, pero cuidado, sudar más no significa perder más grasa. Sino perder más líquido, que cuando volvamos a beber vamos a recuperar.
Tengo un amigo empeñado en que hacer deporte en ‘condiciones límite’ te ayuda mentalmente a la hora de esforzarte más. Pero a menos que seamos deportistas de élite que hayamos llegado prácticamente a nuestro límite físico, será mejor dejar este tipo de pensamientos a un lado, ya que lo más sencillo será que acabemos lesionados.
A ver, no sé si ha quedado claro, pero por si acaso: si podemos evitar entrenar con calor, debemos hacerlo. De esta manera evitaremos posibles enfermedades además del previamente citado golpe de calor.
Como podréis deducir, nuestro cuerpo no es perfecto, y los sistemas de enfriamiento natural del cuerpo pueden fallar. Para ayudar a regular la temperatura corporal, nuestro cuerpo envía más sangre a circular a través de la piel, aumentando el ritmo cardíaco y disminuyendo la sangre que va a los músculos.
Esto hace que nuestro rendimiento no sea tan bueno como en unas condiciones ‘normales’ de entrenamiento. Por tanto no podremos progresar en nuestros entrenamientos, ya que no podremos alcanzar nuestro 100% máximo.
¡Y nada más! Espero que os haya resultado interesante y útil este post sobre si es útil entrenar con calor. Cualquier duda, ya sabéis, ponédmela en los comentarios o id a mis redes. Os espero en próximas publicaciones.
¡Hasta pronto majos!
Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.plugin cookies
ACEPTAR